Adamant: Hardest metal

Una aguja en un pajar---LA ESTRATEGIA DE LA COORDINADORA DEMOCRÁTICA

Nelson Lara

Durante el mes de mayo del año pasado la Coordinadora Democrática tomó la decisión de integrar en un solo equipo de trabajo las Comisiones de Estrategia de la CTV, de Fedecamaras, de Gente de Petróleo, de los Partidos Políticos y de la Sociedad Civil. En ese mismo mes se acordaron los mismos objetivos, los mismos tiempos, el mismo rumbo y los mismos medios para lograrlos. La conclusión fue el diseño de una estrategia, que hemos denominado de cerco. Una estrategia sustentada por principios legitimados en el documento firmado por todas las organizaciones integrantes de la Coordinadora Democrática el 5 de Julio de ese año y ratificados en el día de hoy en la lectura del Profesor Manuel Caballero.

El primer objetivo de nuestra estrategia es cambiar el presidente, pero no como sea. Y es aquí donde reafirmamos en la práctica nuestros valores democráticos, de libertad, pluralismo y convivencia pacifica, por ello tomamos la ruta electoral y apelamos al pueblo venezolano para que con votos ice nuevamente la bandera de la democracia en Miraflores. El segundo objetivo se refiere a la reconstrucción de Venezuela, a las difíciles decisiones públicas que habrá que tomar para avanzar hacia una calidad de vida digna de los venezolanos y en consecuencia hacer viable la gobernabilidad. Este objetivo está siendo intensamente trabajado en la actualidad para establecer un programa mínimo de consensos, que saque del debate político temas de primera prioridad nacional, como por ejemplo, la lucha contra la pobreza. Complementado con una sólida vocación de incluir a todos los venezolanos. El odio, la retaliación y el atropello que hoy sufrimos no permitiremos que se repita. Venezuela nos necesita a todos.

En tal sentido, empezamos afirmando que la Coordinadora Democrática no solamente ha tenido una estrategia claramente definida, sino que la estrategia de cerco sirvió de referencia para la toma de decisiones a lo largo del año 2002 y durante el desarrollo del paro cívico nacional. Es de cerco porque representa el efecto de una acción pro activa envolvente que se afinca en el terreno constitucional y que apunta al logro de los objetivos definidos. Es de cerco porque reacciona ante los incentivos que introduce cada Articulo violado de la Constitución y de las Leyes de la República, especialmente la Ley de Salvaguarda del Patrimonio Público, transformándose en una ofensiva de respuesta contra Chávez y su gobierno, expresada en protestas y denuncias formales apoyadas con gigantescas movilizaciones de calle ante la Fiscalía, Defensoría del Pueblo, Asamblea Nacional, Contraloría General de la República , CNE y Tribunal Supremo de Justicia, instituciones hoy suficientemente probadas en sus limitaciones de autonomía. El cerco aprieta también en el escenario internacional. Surge la solidaridad con el pueblo venezolano. La presencia del Centro Carter, del PNUD y del Secretario General de la OEA, impulsaron la constitución de la Mesa de Negociación y Acuerdos y luego la formación del Grupo de Amigos, lo que viene a configurar la ventana de la verdad, para a través de ella develarle al mundo la terrible verdad venezolana.

En el mes de Febrero pasado ajustamos la estrategia. Pasamos de la Estrategia de Cerco a la Estrategia de Cerco con Salida. Es conveniente subrayar que en ella no se descarta ningún instrumento electoral, ni tampoco ningún escenario constitucional. Se tuvo el cuidado de contemplar objetivamente los niveles de maniobrabilidad del tipo de jugador con quien se confronta, por lo que no habrán sorpresas. En éste marco estamos frente a una realidad y es que los tiempos establecen que faltan apenas 144 días para empezar a transitar la opción del Referendo Revocatorio. De allí que en los próximos días la Coordinadora Democrática iniciará un despliegue nacional de movilización de cuadros de trabajo para organizar la totalidad de la estructura en todas las mesas electorales. Una estructura electoral capaz de movilizar y defender cuatro millones de votos para cualquier tipo de elección.

Por otra parte, los tiempos del gobierno se acortan y la fecha 19 de Agosto como mitad del período presidencial actúa como un tic tac de una cuenta regresiva que exige la mayor eficiencia y efectividad de cada actor de la oposición. Por eso aprobamos la política de que no se quede una organización de la Coordinadora Democrática o una individualidad en toda Venezuela sin una responsabilidad especifica en la Estrategia de Cerco. 144 días, a lo largo de los cuales, estallará con más vehemencia el concepto “Chávez contra la sociedad”, expresado por una alta conflictividad económica, social y política, el hambre y el desempleo, el colapso de los servicios de salud, educación y seguridad, deudas públicas salariales incumplidas, represión y violación de los derechos humanos, terrorismo y narcoguerrilla, el ataque a los medios de comunicación social y el puntillazo final enfocado al aparato productivo, al sector comercio y a lo que queda de la industria petrolera. La respuesta es entonces “La sociedad contra Chávez”. Toda mujer, todo hombre, toda organización, debe asumir una posición de vanguardia en la lucha por la solución de los conflictos sociales. Cuando muere un niño por desnutrición o por falta de recursos en la Maternidad Concepción Palacios, Chávez enfrenta la sociedad, entonces vamos a darle una respuesta. Y es aquí es donde cobra especial relevancia la Red Nacional de Asambleas de Ciudadanos con las cuales se aspira incorporar a todo venezolano en oposición para establecerle su espacio de lucha por el rescate de la democracia venezolana y en consecuencia pasar de ser una multitud aislada a ser una multitud organizada. En pocas palabras, es transformar la fuerza en poder.

La estrategia de cerco necesita de una organización especial para su ejecución y por ello se dedicaron varias semanas de esfuerzo no sólo a su diseño, sino a reforzar el concepto de construir la unidad en la diversidad y es lo que permite hoy asegurar que todos y cada uno de nosotros empujamos en el mismo sentido, sin impaciencia, sin atajos, seguros de lo que hacemos, basándonos en la razón, ciudad por ciudad, pueblo por pueblo, caserío por caserío, hasta acabar con ésta pesadilla y devolverle la paz a Venezuela.

Carlos Ortega."CARTA A LOS VENEZOLANOS"

Cuando en octubre de 1999 convocamos el paro petrolero, obligados por la actitud intimidatoria, antiobrera, autoritaria y déspota del actual régimen, descubrimos y alertamos a todo el país sobre la ineptitud, incompetencia y desmaña de este gobierno corrupto presidido por el Sr. Chávez. En ese momento comenzó una lucha tenaz, persistente, desigual pero valiente, con un solo objetivo: mantener las conquistas democráticas logradas por los trabajadores y sus familias, sus dirigentes sindicales honestos y el pueblo venezolano en general. Pasando por las elecciones de FEDEPETROL y de la C.T.V., hasta llegar a los hechos del 11 de abril, pusimos nuestro empeño en la unidad de los sectores democráticos del país. Esa era una constante en nuestra lucha y para todos los efectos, el interés en la unidad de los venezolanos estaba por encima de cualquier interés personal. La lucha era desigual contra un régimen mentiroso y un Presidente con un discurso que confundía y lograba despertar esperanzas en la mayoría de nuestro noble pueblo, pero sabíamos que esas ilusiones estaban siendo frustradas por una camarilla de ineptos y corruptos que en nombre de una supuesta "revolución" saqueaban, robaban, asaltaban, los dineros necesarios para construir el país que reclamaban los venezolanos, frustrando de esta manera la idea de una nación que, a lo largo de su historia había logrado una democracia donde sus hijos batallaban día a día por mejorarla, una democracia donde sus hijos lograban, estudiando y trabajando, mejorar su calidad de vida y la de sus familias y gozaban, en concordancia con nuestro gentilicio, de los beneficios que la unidad e integración de los sectores de la vida nacional, otorgan a la sociedad moderna. Unidad e integración que se desvanecieron en esta "robolución" con las consecuencias conocidas por todos. En la primera etapa de esta lucha, solicitábamos la rectificación de esas políticas erradas del actual régimen y de manera vehemente convocamos a un gran diálogo nacional que permitiera la apertura y la construcción de un gobierno para todos los venezolanos. Algunos funcionarios del alto gobierno se reunían con nosotros discutiendo nuestro proyecto de unidad e integración nacional, pero cuando se lo explicaban al "amo y señor", regresaban regañados y acusados de contrarrevolucionarios. Posteriormente, ustedes lo saben, muchos de ellos abandonaron al gobierno y a su partido y hoy nos acompañan en las marchas y protestas contra el Sr. Chávez. Así llegamos a los sucesos del 11 de abril, en los cuales el régimen actual conoció de la entereza y valentía de este bravo pueblo. Estos hechos, que la historia se encargará de juzgar oportunamente, no fueron suficientes para lograr, siquiera, una reflexión por parte de este régimen indolente, sordo, ciego, insensato e irresponsable, y menos aun una rectificación de sus políticas y conductas; muy al contrario, el régimen, fiel a su comportamiento, vicios, mandos y guías, continuó en su desgobierno, arreció en su conducta antidemocrática, represiva y opresiva, avasallante, intimidante, tiránica, y sometiendo, mediante la compra de lealtades, al resto de los poderes públicos lograba que hombres y mujeres que en el pasado gozaron de prestigio y buen nombre, se convirtieran desde sus diferentes responsabilidades de gobierno, en seres genuflexos, cobardes, mentirosos y lisonjeros de este oprobioso sistema dirigido por el Sr. Chávez. La sangre derramada, que ha bañado de luto el suelo patrio, poco le importa a este régimen, al dictadorzuelo. El Sr. Chávez arremetió contra los medios de comunicación, contra la C.T.V., contra FEDECAMARAS, en fin, contra toda clase de institucionalidad y en definitiva, contra el pueblo en general. Pero nuevamente se equivocaba el aprendiz de dictador y el bravo pueblo de Venezuela continuó en las calles y ya no sólo fue Caracas, sino que se incorporaron a la lucha todas las regiones del país. La valentía, el arrojo, el coraje, la gallardía de nuestros padres, de nuestros hermanos y de nuestros hijos, se sentían a lo largo y ancho de nuestra patria. La gente decidió no olvidar esos muertos y desde cada uno de esos briosos corazones salió aquella proclama que convertimos en dogma: NI UN PASO ATRÁS, PROHIBIDO OLVIDAR. De esta manera, aceleradamente, ocurrieron hechos y sucesos que desembocaron inevitablemente en el paro general convocado por la sociedad civil el 2 de diciembre pasado. Era un clamor, una solicitud colectiva de la inmensa mayoría de los venezolanos; la ingobernabilidad era evidente y ya no sólo era la comunidad nacional sino también la comunidad internacional, la que exigía una salida inmediata a la grave crisis que atravesaba nuestra nación. Este pueblo de libertadores reclamaba ELECCIONES YA. La salida democrática era y continúa siendo una necesidad para sacar a Venezuela y a los venezolanos de este atolladero histórico al cual el actual régimen los somete, pero que es imposible que logre consolidar, pues la reciedumbre de esta sociedad civil, finalmente logrará vencer y superar tan duros escollos. Como acertadamente expresara un insigne político italiano "debemos ver esta lucha con el pesimismo de la inteligencia, con el sentido crítico de la duda, pero también con el optimismo de la voluntad, porque con la voluntad nada es fatal, nada es inevitable, ni inmodificable", por ello es de destacar que la fuerza de la voluntad y del amor por la libertad escribe ahora su historia en nuestra patria; las mujeres y los hombres de esta gloriosa Venezuela escriben ahora su destino, y, en esta búsqueda urgente y constante de senderos prósperos y promisorios para la República, no podemos desmayar porque con nuestra voluntad y bravura derrotaremos al tirano y a sus cómplices mas temprano que tarde. ¡Eso lo juramos! Las amenazas reales de acabar con mi vida, emanadas de un grupo de criminales adulantes que pretenden ofrecer mi cabeza como una manera de congraciarse con "el amo", aunadas a la responsabilidad que tengo para con nuestro país, me obligan a tomar la prudente, pero no menos difícil y dura salida del asilo diplomático. Sin embargo, mi perseverancia, tenacidad y templanza son inquebrantables en el logro de la salida democrática a esta crisis, y continuarán al lado de esos nuevos líderes valientes quienes, junto a sus viejos líderes, están batallando para construir la patria soñada y esperada por todos. El nuevo escenario donde me corresponderá continuar esta hermosa lucha, cuyo sentido más genuino esta íntimamente entrelazado con mi condición de obrero, la cual no he olvidado ni olvidaré nunca, lo asumo como una coyuntura, como una eventualidad que debo atravesar en la conquista de los ideales de libertad y justicia en los que creo, así como para lograr el objetivo de tener nuevamente en nuestro país una democracia, plena y robusta. Un nuevo escenario, repito, se presenta al frente y lo asumimos con la misma responsabilidad. Cuando miro hacia atrás y pienso en los ideales y valores que me inculcaron mis padres, no lamento el precio que he tenido que pagar por ejercer la defensa de la libertad y de los principios democráticos, además porque estoy convencido que he hecho lo que tenía que hacer. No podrán con el valor mas preciado que siempre me ha acompañado: m i d i g n i d a d. No podrán jamás con la dignidad de este pueblo que ha demostrado suficiente y fehacientemente su bravura y arresto. Finalmente, agradezco a mis compañeros de la C.T.V., hombres y mujeres, quienes han sabido interpretar al país, promoviendo y apoyando esta guerra contra el tirano y de la que estoy seguro, no desmayarán hasta lograrlo. A las diferentes federaciones nacionales y regionales, a los sindicatos de base, independientemente de su posición política o ideológica: Mis hermanos de lucha. A la gente de los medios de comunicación, con mucha humildad les envío mi palabra de reconocimiento y agradecimiento, porque con mucho esfuerzo y coraje, diariamente batallan por mantener informado al país y al mundo, porque sin ellos el mundo no sabría, como sí lo sabe ahora, cuál es el verdadero carácter de esta dictadura disfrazada de democracia. A la gente del petróleo, a sus líderes, que están dando la pelea. A los 17 mil hombres y mujeres que pronto serán reintegrados a sus puestos de trabajo y más unidos que nunca, ayudarán a superar la crisis. A Carlos Fernández y al resto del empresariado venezolano quienes, desde FEDECAMARAS y junto a las demás organizaciones gremiales, de manera desprendida han contribuido en esta lucha. A la Iglesia y los distintos credos presentes en el país, les pido que brinden el apoyo espiritual a tantos héroes y heroínas anónimos que hoy en día trabajan por la reconciliación nacional. A mi madre, mis hijos, mis hermanos, mis amigos y mi familia en general, quienes con su apoyo incondicional, me han dado fortaleza para seguir adelante. Al Dr. Abel Pacheco, Presidente de Costa Rica y a su gobierno, por acogerme en ese país en estos aciagos momentos de mi vida política, y particularmente al Sr. Embajador de Costa Rica en nuestro país, Lic. Ricardo Lizano, así como a los funcionarios de dicha embajada, quienes hicieron mas humanos y llevaderos los catorce días que compartí con ellos antes de mi salida hacia su país. Pero el mayor agradecimiento de mi parte, siempre estará al lado de esos hombres y mujeres que han arriesgado sus vidas, que con valentía recorrieron y recorren marchando las calles y avenidas de nuestro país, escribiendo la nueva historia de esta gran nación. A los caídos, que no los muertos porque como decía Alí Primera "Los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos", a sus familias, es decir, en general, a la sociedad civil, a sus partidos políticos, a sus ONG, mi agradecimiento y les digo: LA LUCHA CONTINÚA. Compatriotas la salida está cerca, el tirano no pasará. Ese disfraz de Presidente que el Sr. Chávez ostenta muy pronto le será despojado por el glorioso y bravo pueblo de Venezuela. NI UN PASO ATRÁS, PROHIBIDO OLVIDAR, y continuemos marchando por la reconstrucción y unidad del país. Yo por mi parte llevaré por las rutas del mundo mi bandera como estandarte para decir, como Mario Benedetti: "llevo a cuestas un ladrillo para decirle al mundo cómo era mi casa". Gracias al pueblo venezolano.

CARLOS ORTEGA C.I. V.- 3.395.021

Cronicas de un Viaje por Juan Fernandez

Anexo documento sobre la evolucion de este viaje, les agradezco su difusion pues mucha gente quiere saber lo que estamos haciendo. Esta semana que viene vamos a hacer contactos con miembros del congreso, y autoridades del estado de la Florida.

Un abrazo, cualquier cosa me pueden contactar por este mismo email..

Saludos, Juan Fernandez

Como saben en las circunstancias actuales, las oportunidades se presentan y para contribuir como mejor podamos a nuestro país, por eso aprovechamos la oportunidad de sostener reuniones con muy importantes factores aquí en los Estados Unidos, a continuación las crónicas de lo ocurrido:

En primer lugar, diseñamos una presentación que llamamos MIRANDO A TRAVES DE UNA VENTANA. Comenzamos la misma indicando la motivación de estar en esta lucha por un país democrático y libre. Luego realizamos una breve descripción de la situación general, y de los resultados negativos en los cuatro años de la gestión económica y social del actual gobierno. Posteriormente, hablamos sobre, que podemos hacer. Allí definimos dos fases, la primera concentrada en la salida constitucional del actual gobierno, mencionando 2 elementos, el primero la Renuncia de Chávez y su equipo de gobierno, y las Propuestas de Carter, (la enmienda para las elecciones adelantadas y el Referéndum Revocatorio). La conclusión focalizar en el Revocatorio, derecho de los venezolanos. Para esto es indispensable: FECHA DEFINIDA, RECURSOS FINANCIEROS, AUTORIDAD ELECTORAL Y LA COMUNICDAD INTERNACIONAL ACTUANDO COMO GARANTE DE LA TRANSPARENCIA DE LA CONSULTA. La segunda fase consiste en la Reconstrucción y Crecimiento del país. Comenzando por la “Visión Compartida de País” y un principio de acuerdos, para estar todos alineados y la elaboración de un contrato entre los ciudadanos para reflejar obligaciones, deberes y derechos, indicadores para lograr metas y contar con poderes independientes del estado, y así tener un país democrático y una Venezuela Siglo XXI. Hablamos por supuesto de la industria petrolera con especial atención de la situación de los trabajadores , con énfasis en la situación actual de los seis compañeros y mi persona, así como la de quienes por tener ideas diferentes sobre el gobierno actual, somos perseguidos políticos. Nos reunimos con analistas políticos, oficiales del Dpto. de Estado y de la Oficina de la Casa Blanca, representantes de la asociación Mundial de Juristas por la Paz, embajadores de la OEA, en la ciudad de Washington. De allí a Nueva York, donde dimos una charla en el Consejo de las Américas, reunión con la comunidad financiera e intercambio con periodistas. Ahora en Miami, estableciendo contacto con diferentes medios de comunicación, las fuerzas vivas. En todos los lugares nos reunimos continuamente con compatriotas, preocupados y colaborando con Venezuela. La respuesta, muy positiva y alentadora, conocen de nuestro esfuerzo y sacrificio, espíritu democrático. Lo anterior reafirma, mas que nunca que nos acompaña la razón y vamos a lograr la salida para llevar a Venezuela al siglo XXI. Es todo, por esta Crónica, un gran saludo y gracias a Dios y la Virgen por darnos esta oportunidad por Venezuela.

Saludos, Juan A. Fernández G.

Cuando yo me vaya

TOMÁS POLANCO ALCÁNTARA EL NACIONAL - Sábado 08 de Marzo de 2003

Con la muerte del escritor e historiador Tomás Polanco Alcántara, ocurrida el pasado 21 de diciembre, salió a la luz un texto que legara póstumamente a sus hijos y en el que reitera su condición de venezolano de altos valores morales. Cercano a su desaparición física, el intelectual recordó a sus descendientes los principios esenciales de la honestidad, el trabajo y la eficiencia, y la necesidad de que Venezuela sea siempre un país donde exista libertad, tolerancia y progreso

En los vuelos largos, los viajeros veteranos o muy sensibles advierten, cuando más o menos falta una hora para llegar, que algo está pasando. Se ha iniciado el descenso que obliga a calibrar la presión interior con la altura. Un rato más tarde, el descenso es evidente y se observan previsiones para preparar el fin. Cuando falta poco, el capitán, con la pista enfrente, lo anuncia. En poco tiempo todo terminará.

La vida humana es similar. En determinado momento se siente que algo está pasando. Nada es igual que antes. Por más esfuerzos que quieran hacerse, es inútil. Pronto se acelerará el proceso hasta que llegue el final.

No tengo en estos momentos, según dicen Luis Enrique e Istúriz, ningún problema especial, pero el descenso se ha iniciado y quiero, antes de formar parte de mi querido Avila, hablarles de unas cuantas cosas de las cuales solamente se hablará después que yo me vaya.

Lo que más me importa es que ustedes traten y enseñen a sus hijos a vivir dentro de tres normas permanentes: el trabajo, la honestidad y la eficiencia.

El trabajo no es una maldición ni un castigo. Nunca dejen de trabajar.

Es el precio de la vida: ganarás el pan con el sudor de tu frente. Todo trabajo es bueno, es digno, es honesto.

Recuerden siempre que el trabajo tiene dos modalidades, una, la de servir de instrumento para alcanzar los medios materiales que necesita la vida. La otra, cumplir con la obligación de contribuir a la fortaleza de la colectividad. Pero nunca entiendan al trabajo como un fin, sino como un medio. Como fin es un disparate.

Como medio es la forma legítima de vivir.

La honestidad resulta fundamental para la vida. La aprendí de mi padre y de mi abuelo. Es no tomar lo que no es de uno, es hacer lo que se debe hacer y no hacer lo que no se debe hacer.

La eficiencia requiere hacer bien lo que se debe hacer o al menos procurarlo.

Nunca duden en trabajar, en ser honestos, en ser eficientes.

Hablar con Dios.

Crean siempre en Dios. A él nunca se le puede ver pero siempre lo sentirán, sobre todo en caso de necesidad.

Hablen con Dios. Eso es orar. Decirle lo que uno quiere, lo que se necesita y pedirle ayuda, no la que uno quiere sino la que él le dé. Rezar no es recitar una oración formal que no se entiende, rezar es eso, hablar con Dios. Sin embargo, de las oraciones formales, el Padre Nuestro lo abarca todo, el Credo señala nuestras creencias como cristianos, el Ave María, el ruego a la Santísima Virgen para que ella ruegue por nosotros en el momento de impetrarla y en la hora de la muerte.

Les pido que procuren ser católicos con todo lo que ello significa. Nunca dejen de practicar esa religión a la que hemos pertenecido todos. Respeten a sus sacerdotes y ayúdenlos en sus obras en cuanto sea posible. Todo sin perder de vista la tolerancia, el respeto por las creencias y conductas de los demás y la solidaridad humana.

No le guarden rencor a nadie. No odien a nadie. Esos sentimientos hacen mucho daño a quien los experimenta.

Procuren siempre hacer el bien, incluso a quienes les hubiesen causado algún daño o sean personas desconocidas.

No causen, voluntariamente, daño a nadie. No olviden que se trata de una norma cristiana que tiene un profundo contenido práctico: quien recibe un daño puede que no lo cobre, pero es muy probable que sí lo lleguen a hacer sus hijos, sus nietos, sus parientes.

Hacer un daño es tener, por tanto, una espada sobre la cabeza, que no sabemos cuándo nos va a herir.

No discrimen a nadie por su raza, su nacionalidad, su idioma, sus costumbres, el color de su piel. Por nada.

La discriminación es una forma cruel de dañar a gente inocente. Por eso es abominable.

Respeten su hogar, pase lo que pase. Cada hogar tiene su forma de ser respetado, la de uno no es la de otro, pero en todos ese respeto es indispensable.

Atiendan a ese hogar. Educar a un niño es una seria tarea. Lo que ustedes hagan, el niño lo verá cuidadosamente y será su guía. Manejar bien el hogar, con un profundo respeto, es la mejor educación para los hijos.

Sean generosos, nunca avaros. Es mejor tener menos y dar más que tener más y dar menos o nada.

Procuren leer constantemente para así conocer nuevas ideas y mejorar las existentes, para estar al tanto de los avances de la cultura, para una continua superación de sí mismos. Por parecidas razones escuchen música, no cualquier tipo de música, sino la que eleva el alma.

Venerar a la Patria

Ojalá siempre los anime, a ustedes y a mis nietos, un fervoroso amor por Venezuela. Debemos querer, amar y venerar a la Patria. No hay que ocuparse tanto de morir por ella, que casi siempre es inútil, sino de vivir por ella y para ella. Así decía don Augusto Mijares.

Sean siempre venezolanos, orgullosos de su país. Este es el nuestro. Hay que darse cuenta que cada ser humano, para poder existir, supone, desde los tatarabuelos, 30 otros detrás de él.

Y de los que corresponden a ustedes, casi 90% nacieron, vivieron y murieron en Caracas. Aquí están sus restos, sus costumbres. Afuera hay que comenzar de nuevo. No crean que eso es sencillo y que se justifica. Sólo se puede hacer en casos muy extremos y con plena conciencia de no ir al Paraíso sino al Purgatorio.

Los demás no son mejores que nosotros. Puede que se alimenten mejor, que tengan mejor salud, que vivan más tranquilos. La verdad es que solamente son distintos.

Contribuyan a que el nuestro sea un país donde exista libertad, tolerancia, progreso. Cada uno debe hacer lo suyo sin creerse redentor de la Patria.

Les ruego ocuparse de mis libros.

La biblioteca la pueden regalar a la institución que estimen conveniente.

Pero los libros que escribí, procuren que, al ser ofrecidos al público, el modesto beneficio que produzcan sea utilizado en beneficio de estudiantes que necesiten ayuda para seguir estudiando.

No se olviden nunca de rezar por mí para que alcance la vida eterna.

De mí quedarán unas cenizas y cuando observen el Avila recuerden que allá está su padre, contento de verlos y siempre bendiciéndolos.

Último artículo escrito por Janet Kelly en El Nacional: Barricadas

Por Janet Kelly 13 de marzo de 2003

Hace unos años durante la profunda recesión y crisis financiera de los noventa, mi colega Asdrúbal Baptista opinó que, si bien estábamos en un punto muy bajo, no se podía decir necesariamente que habíamos "tocado fondo". Los países siempre pueden caer más; no hay fondo. Jamás hubiera pensado en 1994 que, casi diez años después, tendría que hacer un desvío en la Avenida Libertador porque una barricada estaría bloqueando el acceso a la zona cerca de la sede de Pdvsa en La Campiña. Esta barricada está construida de piedras y desechos varios, como un símbolo de la absoluta desintegración y división de la sociedad venezolana de hoy. Como protección para nuestra otrora gran empresa petrolera, ahora tenemos improvisión y la amenaza de violencia. El sistema entero está trancado con muchas barricadas, difíciles de desmontar, poderosas y destructivas en sus efectos.

Los venezolanos están dándose cuenta de que la tarea de reconstrucción será larga. En su último programa dominical, el presidente Chávez se refirió a "la miseria humana concentrada en la Plaza Altamira". Ojalá que Altamira fuera el único foco de miseria, porque sería fácil resolver el problema. Pero la miseria se ha instalado en los alrededores de Pdvsa, en las plazas de Caracas, en las empresas, en las universidades, en la administración pública y en los hogares venezolanos. En cuatro años, la mayoría de los venezolanos han ido perdiendo la esperanza.

La desesperanza crea barricadas también en las mentes de las personas, porque, con cada día que avanza, parece más lejos la posibilidad de desmontar lo hecho. Hay una tentación a tirar la toalla: irse no es un opción para la gente en general. Desgraciadamente, algunos están concluyendo que lo único que queda es encogerse, pasar agachado y tratar de sobrevivir. En el oficialismo, se verían estos pensamientos oscuros con desprecio, como los lamentos de los desplazados que no se conforman con el futuro bonito propuesto por la "revolución". Pero de esta revolución tal como está concebida no saldrá ningún futuro mejor, como evidencia cualquier paseo por las calles y carreteras del país. No se puede construir la prosperidad sobre la base de buhoneros y conuqueros con modelos dignos de Pol Pot. La miseria está en todas partes, pero Venezuela no tiene que ser así. Tiene que buscar, para todos, modernidad

El país democrático reconoce también que no se puede remplazar un proyecto impuesto sin el consentimiento de la mayoría por otro que no haya ganado la legitimidad por la vía electoral. Ya es evidente que el gobierno perdió hace tiempo su mayoría y que el apoyo que todavía tiene viene de los pocos beneficiados del régimen actual y de quienes temen un regreso a un pasado que no les concedió oportunidades. Por eso es tan importante que la oposición ofrezca futuro, y no una reedición del modelo anterior. Muchas grupos están haciendo un esfuerzo para diseñar ese futuro, como evidencian los documentos que se están presentando en estos días. Es importante seguir en la vía electoral, para que todo quede cristalino en cuanto a lo que quiere el pueblo.

La posibilidad de elecciones luce lejano y los avances de la Mesa de Negociación y del Grupo de Amigos se parecen a un baile a paso lento. Hay muchos que creen firmemente que el régimen podrá utilizar su poder gubernamental para trancar el juego, ganar tiempo, cansar a sus opositores y mantenerse en el poder. Esta actitud es otra barricada contra la acción y la organización. En particular, la Coordinadora Democrática, actualmente en un proceso conflictivo de repensamiento de su estrategia, tiene que reconocer que la organización necesaria es una organización electoral capaz de aprovechar las estructuras existentes de sus varios componentes en una red eficiente de movilización. La ley favorece la oposición en cuanto a la claridad del proceso venidero: un referendo revocatorio en el cual todos los votantes puedan expresar su voz. Los amigos de afuera podrán velar por la pulcritud del proceso. Podrán condenar a un gobierno que salga de las reglas. Pero sólo los venezolanos están llamados a forjar una poderosa coalición de voluntades para escoger el camino del futuro.

Hay barricadas en la calle que hay que desmontar. También hay barricadas en el pensamiento que tienen que ser tumbadas rápidamente para facilitar el tipo de acción, planificación y organización necesaria para los meses venideros.

You are not logged in