¡AUXILIO!
La Habana 26 de mayo del 2003
Hermano Alonso :
Esos escritos que usted a diario le manda al pueblo de Venezuela son para nosotros los cubanos en Cuba mensajes de esperanza. Sus alertas son reenviados a Cuba por diversas maneras y nos llegan como un rayo de luz que no puede ser borrado ni detenido.
Viví con mi hoy prisionero esposo en la bella ciudad de Cienfuegos, donde usted nació y creció de niño y que ahora nos recuerda con la carta que el fallecido José Ramón Muñiz le enviara a su padre hace tanto tiempo ya.
Sus ensayos son copiados a mano y repartidos entre la disidencia al menos en la ciudad de La Habana. Ayer domingo en la Iglesia Santa Rita, donde nos congregamos en silencio las madres, hermanas y esposas de muchos presos políticos, se leyó el que trataba sobre la alfabetización. Muchas de nosotros lloramos desconsoladamente.
Quisiéramos pedirle que por su vía nos ayude a divulgar el esfuerzo que hacemos todos los domingos para que nuestros presos reciban un trato humano y digno, como que se les permitan el sagrado y humano derecho a recibir visitas de sus familiares más cercanos como padres, hermanos e hijos. Cada día la seguridad del estado arrecia más el círculo de presión en contra nuestra y cada día somos menos quienes nos congregamos en silencio y en oración en pro de nuestros presos y su digna existencia en las prisiones de Castro. Ayúdenos, señor Alonso.
Su fiel servidora y gran admiradora en Cuba,
Ofelia Astorac
ROBERT ALONSO robertalonso2003@cantv.net