EE.UU., molesto con el gobierno de Lula
LA GUERRA: LA OPOSICION BRASILEÑA A LA GUERRA El Clarin Eleonora Gosman. SAN PABLO. CORRESPONSAL .
Estados Unidos transmitió, en público y por primera vez, su "desagrado" ante la posición de Brasil, contra la guerra en Irak. La embajadora Donna Hrinak llevó ese mensaje al Congreso brasileño, que la había invitado a una sesión especial sobre el conflicto en el golfo Pérsico. También estaba presente el representante de Gran Bretaña, Roger Bone. Hrinak, con quien el gobierno de Lula mantenía hasta ahora buenas relaciones, acudió al Senado donde estaba previsto que respondería a inquietudes de los legisladores. Se trata de entrevistas abiertas a la prensa, pero la diplomática exigió que se hiciera a puertas cerradas. Leyó su declaración. Pero cuando los senadores y diputados empezaron con las preguntas, alegó apuro y se retiró sin contestar. En la exposición que hizo ante los parlamentarios, Hrinak dijo que la postura del gobierno de Lula cayó mal en Washington. "Las últimas semanas tuve que explicar a mis jefes y al Congreso norteamericano por qué Brasil, que es nuestro socio esencial en el hemisferio, no está de nuestro lado". Cuando la embajadora dejaba la sala, el senador Eduardo Suplicy le enrostró: "Nos está faltando el respeto al dejarnos sin respuestas". Más flemático, el embajador británico dijo que "Gran Bretaña comparte con Brasil la opinión sobre la importancia de la ONU en la reconstrucción de Irak".