SI SABEMOS, PERO ¿CUANDO?
Everett Bauman considera que a Chávez se lo cargarán después de Saddam.
Y eso Chávez lo sabe, por lo cual juega a la derrota de Bush en el Medio Oriente.
GUSTAVO GARCÍA SOUBLETTE
Me siento con derecho a glosar a Everett Bauman, periodista norteamericano que más sabe de lo que sobre Venezuela se piensa en la capital norteamericana, con acceso a los más altos niveles de Washington y, además, con un reconocido amor por Venezuela. En realidad, Baumen es venezolano. Tomó nuestra nacionalidad cuando sus hijos venezolanos le dieron nietos venezolanos y su esposa ya era una muy autorizada escritora en inglés especializada en la más amorosa descripción de la naturaleza y la sociedad venezolanas. Había llegado aquí antes de la Revolución de Octubre como corresponsal de United Press.
Uslar Pietri le menciona, en su relato de aquellos días, como periodista bien enterado de lo que estaba pasando. Betancourt le confía la traducción al inglés de su "Venezuela, Política y Petróleo". Con ochenta años sobre sus espaldas, Bauman hace periodismo en Washington y visita Venezuela dos veces al año, para revisar sus fuentes y comerse, no importa la fecha, un plato criollo en "El Portón".
Sus certeros análisis aparecen en "El Universal", y de vez en cuando, en "Zeta".
Consciente de la necesidad de ventilar la democracia venezolana asfixiada por la podredumbre de la IV República, él compartió una vez el criterio, enunciado por el embajador John Maisto y aceptado en Washington, de que en Chávez no había que mirar sus labios, sino sus manos. Como Washington, él ha cambiado de opinión. Hoy opina que "las manos de Chávez están haciendo lo que dijeron sus labios" -el crédito de esta frase hay que dárselo a la perspicaz embajadora Donna Hrinak.
Lo de Bauman no es opinión. Es información de periodista solvente. En legítimo ejercicio de mi antiquísima y estrecha amistad con él, pillo algunas de las frases contenidas en su crónica de ayer:
- "El liderazgo estadounidense ha perdido todas sus ilusiones por la llamada revolución bolivariana proclamada por el presidente Hugo Chávez, y ahora lo considera a él y a su equipo casi como enemigos".
- Recuerda que "...el flamante militar criollo contaba con cierta simpatía entre los funcionarios del Departamento de Estado y ciertos parlamentarios del Partido Demócrata". Pero hoy puede citar a un alto funcionario norteamericano que considera a Chávez "...otro caudillo ambicioso de poder... ideólogo capaz de revivir las gastadas teorías del marxismo y el fascismo y encabezar un movimiento mundial contra Estados Unidos y sus aliados occidentales". Según este funcionario, "Chávez comparte la ideas de Saddam Hussein y Fidel Castro de que Estados Unidos será derrotado y humillado en su intento por democratizar el Medio Oriente, y que la alianza occidental es un tigre de papel". (Ojo con lo de "un alto funcionario". Bauman no habla con pendejos. Ni en Washington ni aquí).
- Pero hay más: "Ya el gobierno estadounidense, en su nivel más alto, está convencido de que Chávez presta ayuda a la guerrilla Colombiana".
Ahora bien... Sobre la pregunta (¿Cuando?) que atormenta al lector, ¿que dice Bauman?. A este humilde informador le refresca comprobar que ese maestro -Bauman- a quien ha venido escuchando desde que uno apenas tenía más de veinte años, relaciona la suerte de Chávez con la de Saddam. Todo depende de la agenda iraquí. "Es una ironía de la Historia -dice Bauman-, que el futuro de los países en el Nuevo Mundo está íntimamente ligado a lo que pasará en la cuna de la civilización, el Medio Oriente.
Aunque las probabilidades favorecen a Washington, hay que admitir que la Historia no está determinada por los hombres... Hay demasiados imponderables". Línea más arriba ha escrito que "Por el momento, no es intención de Washington provocar alguna crisis con Chávez. Tiene su plato lleno con Irak y Corea del Norte"... "Se podrá confrontar a Chávez en un momento más oportuno".
Lo cierto es que Chávez está condenado. Siempre lo estuvo. Como dijo
Uslar, en la que posiblemente fue su última frase sobre la política, su proyecto es inviable. Por lo menos en cierto modo, Chávez es lo que de él dice un funcionario norteamericano citado por Bauman, "un loco que desafortunadamente ha podido ganar control de su país". Este loco -digo yo- todavía hará grandes locuras. Pero Venezuela sobrevivirá a todas ellas y será un gran país. Un nuevo país.
Rafael Poleo también piensa que el golpe de gracia viene del norte...
Bauman lo ubica después de Saddam, algunos piensan que antes... La "lógica" dice que USA atacará a Irak con la seguridad del petróleo venezolano en plena producción. Dicen que Cisneros terminó de convencer a Bush, jugando golf en Dominicana. Colin Powell estaría encargado del mandado... PDVSA ya tiene inventariadas y localizadas en USA todas las partes y piezas de los equipos destruidos por los chavistas. Los norteamericanos suplirían todo inmediatamente, la reparación se haría por venezolanos calificados en tiempo record y la producción volvería a los niveles anteriores al paro. Hay queda el reto: ¿Antes, después o durante?
Cada día Chávez pierde mas terreno internacionalmente, los "países amigos" están muy enfadados, incluyendo a Lula y Gaviria. Chaderton acaba de regresar de Brasil derrotado, y es que insisten tercamente en ampliar la comisión de países amigos, lo que es un insulto para los actuales...[?] ...a esto se suman los discursos de Chávez, desempolvados de los años 60s, prometiendo "exportar" revoluciones por Latino América... Agréguenle la actitud triunfalista sobre el paro, el autismo ante las marchas, el Firmazo, los presos políticos, los asesinatos de militares y policías, el terrorismo sobre sedes diplomáticas y la amenaza del cierre de canales de TV... Casi nada...
Revisen las entregas de "Venezuela en Washington" de Sonia Schott en el website de Globovisión, es muy objetiva y puntual. Hay quienes toman la escena internacional como algo obvio o colateral, llegando a desdeñarla cuando no ofrece las evidencias que esperan. Eso no es recomendable.
Estamos cerca, el porcino ya tiene la soga sobre sí, lo sabe y chilla, sus propósitos ya están condenados a muerte, no hace falta halarle el rabo para que corra hacia adelante, él sabe que vendrá el palo y luego sangrará... Amanecerá y veremos.
Ya basta!